Se sirve una mezcla de comida tradicional mediterránea y cocina italiana, lo que lo hace único y delicioso.
Está situado en medio de la playa, rodeado de palmeras, lo que le da un ambiente muy agradable y relajante.
El ambiente es inmejorable, con buena música lounge y un gran ambiente para disfrutar de una comida deliciosa.
Los camareros son muy acogedores y se toman el tiempo para atender a cada mesa, lo que hace que la experiencia sea aún más agradable.
Recomendaría probar el rodaballo, que es magnífico, y el poke bowl vegano, que es una delicia para el paladar.